Se da por bueno a nivel internacional que los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se encuentran en el eje de una nueva configuración del orden económico mundial. Tanto es así que se considera que para el año 2025 el mercado chino habrá superado potencialmente al de EEUU.
Sin embargo, para algunos analistas, incluso los países BRIC ya son una noticia antigua. Es el caso de lo que la empresa de crédito francesa Coface pretende transmitir cuando nos habla de los países PPICS (Perú, Filipinas, Indonesia, Colombia y Sri Lanka).
Las pymes españolas en los mercados exteriores
Del BRICS al PPICS
Se trata de un análisis de devolución de los países PPICS en los últimos cinco años. Una difícil tener resulta que a pesar de la tensión económica internacional estas economías individuales han sostenido crecimiento fuerte amparado en los procesos de reforma tanto del sector empresarial como de la banca y de su macroeconomía.
Lo anterior ha derivado en la mejora de la producción y la expansión financiera importante que, como resultado genera un gran abanico de posibilidades para los emprendedores que tratan de encontrar ventajas competitivas al hablar del asentamiento y lanzamiento de sus negocios.
No se trata de establecer una comparativa entre un país BRICS y otro PPICS, probablemente los segundos no podrán llegar al menos en un plazo corto a los logros en los primeros, sin embargo, no hay que dejar de reconocer en ellos una fuente de crecimiento y unas posibilidades de rendimiento a cinco años verdaderamente alto con un proceso actual de lanzamiento de la escalada de inversión que, parece, un entorno más que recomendable para el emprendimiento.
Un potencial enorme para los próximos diez años
Cuando se analiza la velocidad de aumento de creación de empresas en los países BRICS nos damos cuenta que esta velocidad es simplemente de vértigo, 50 veces más rápido probablemente en cualquier otro país.
La apuesta por los PPICS no conlleva consigo una visión similar de crecimiento brutal de la creación de empresas en los próximos 10 años, sin embargo, si un reconocimiento implícito del potencial de crecimiento que es enorme para el próximo decenio.
Los motivos son realmente simples, los incentivos gubernamentales y el propio deseo para el crecimiento económico general, lo que se traduce en la búsqueda de impulso para las pymes y nuevas empresas a la inversión en las economías emergentes.
Lo anterior se traduce en mayor competencia, mayor crecimiento y creación de empleo; es decir realimenta el proceso ya lanzado.
Los PPICS pueden no tener la misma población o los recursos como los BRICS, pero su posición geográfica, además de la liberalización del comercio y el progreso en las reformas de mercado, deben hacer de ellos una gran oportunidad de negocio en los próximos cinco a 10 años.
