Dentro de la organización de cada empresa además de plantear la estrategia y proyectos a seguir, se debe considerar a los empleados, quienes deben entender la estrategia e implementarla. Pero en muchas de las empresas existe una enorme distancia entre la propia estrategia y su aplicación, al reducirse esta distancia se puede mejorar el rendimiento y entendimiento del empleado.
Si bien son muchas las empresas que ya han definido su estrategia de organización futura respecto a recursos humanos, en su búsqueda de aplicación y de resultados.
Como se sabe para lograr ese objetivo entre la aplicación y los resultados, se encuentran para la ejecución de las ideas y de objetivos establecidos, las personas, pero casi siempre esto genera un abismo, el que por supuesto se debe tratar de reducir al máximo para logar el éxito buscado, es decir la eficiencia. Para ello se debe evitar las pérdidas de tiempo.
Según estudios realizados alrededor de este tema, registran que el 95% de las personas “empleados” no logra entender del todo la estrategia de su organización, y sobretodo cuando presenta una evolución cada vez más rápida.
Asimismo, dentro de las empresas la cúpula directiva de dichas empresas le dedica el 50% del tiempo a tareas que no suelen finalmente aportar valor, siendo una pérdida de tiempo.
Por otro lado, las compañías gastan un 75% de la jornada laboral en gestionar la ejecución de los objetivos. Por lo que si se busca el éxito, la aplicación de una estrategia de cambio también depende de una mejor ejecución y de que la comprensión entre sus empleados sea lo más efectiva posible.
Al encontrarse claros los objetivos para los empleados, se debe decidir si los empleados y colaboradores se encuentran en sus puestos de trabajo adecuados para poder realizar la tarea que les asignaron. Ya que la promoción del empleado hacia su puesto de trabajo adecuado, conjuntamente con la instalación de una correcta plataforma informática logra mejorar la productividad, es la llamada facturación por empleado hasta un 3%.
Un 84% de las organizaciones estima que no utilizan todo el potencial de su capital humano, y es por ello que el 86% de los empleados no se encontrarían motivados.
Aproximadamente entre el 60% y el 70% de los costes fijos de las empresas de servicios pertenecen a personal, es así que cualquier mejora en el rendimiento significa un aumento de la productividad.
A todo esto, se debe tomar con mucho cuidado el perfil del empleado, a la hora de contratarlo en:
-Evaluación
-Eficiencia
-Calidad operativa
-Compensación
-Alineamiento de objetivos, mapa y desarrollo de talento
-Motivación y compromiso
-Orientación
-Retención
-Sucesión.
Como conclusión, para potenciar el rendimiento de los empleados, se debe basar en poder asegurar que el trabajo se realice, contando y manteniendo a la gente ideal y en el puesto adecuado y facilitándoles información y medios para que puedan hacer el trabajo rápidamente.
Lorena,
Te invito a que le eches una ojeada a nuestro producto WorkMeter
Permite gestionar y aumentar la productividad de los empleados, respetando su productividad.
Saludos,
A.Vives
Este es un gran tema, lastima que muchas empresas no le den la importancia necesaria, ya que no cuentan con personal para encargarse de estas areas.
Saludos y muy buen articulo
Como dice Antonio Vives, nosotros implantamos hace un tiempo Workmeter, y nos está dando un resultado espectacular, con un incremento de la productividad de alrededor de un 25%.
ahora los trabajadores son dueños de gestionar su tiempo, y gerencia puede detectar mejor los flujos de trabajo, la productividad de los departamentos, y así preparar mejores estrategias, tomar decisiones acertadas, y promocionar o premiar a los trabajadores que más lo merezcan.