La empresa Acciona de capitales españoles en asociaciación con Acwa Power de origen saudí logro el mayor contrato obtenido por una empresa de España en Marruecos, con el fin de construir una planta de energía termosolar la cual llevará una inversión de 700 millones de euros, la cual producirá 160 megawatios (MW). Dicho anunció se hace una semana antes de que se lleve a cabo la primer cumbre bilateral entre los gobiernos español y marroquí, luego de que el partido popular ganará las elecciones en España.
La planta se instalará en la provincia de Ouarzazate, la cual esta situada al sudeste del país, en esa zona el número de horas de sol supera las 3.000 anuales, 500 más que en el sur de España.
La financiación de esta primera etapa estará a cargo del Banco Mundial, del Banco Africano de Desarrollo, del Fondo para una Tecnología Limpia, de la cooperación francesa y de la Comisión Europea. No contará con ninguna participación española. En dicha etapa será de 500 MW y se estima que finalizará en 2015.
Para la construcción de la planta se utilizará una tecnología solar térmica innovadora similar a la de la planta de Gemasolar (Sevilla), aunque la planta del país Africano tendrá una producción 8 veces mayor que la planta Europea.
Se presentaron más de 20 empresas al concurso público para la adjudicación de dicho contrato de los cuales fueron preseleccionadas 4 empresas entre las cuales quedaron otro español encabezado por Abengoa Solar y su filial de ingeniería Abeinsa, mientras que el tercer proyecto fue integrado por las empresas Enel, de capitales italianos en colaboración con la constructora ACS, mientras que el cuarto proyecto preseleccionado fue el de la empresa Orascom de capitales egipcios en asociación con la alemana Solar Millennium que quebró a finales de 2011, por lo que quedó rápidamente descartado.
La adjudicación de la primera fase del plan solar a un consorcio liderado por una empresa española atenúa el desconformismo que provocó a los grandes empresarios españoles la atribución a dedo, a empresas francesas, de la construcción del tren de alta velocidad marroquí, que enlazará Tánger con Casablanca, si bien varias de las empresas francesas subcontrataron a empresas ferroviarias españolas.
Este es un plan solar se comenzó a gestarse en el año 2009, el cual prevé que para el año 2020 se produzcan 2.000 MW, para lo cual se espera que el gobierno invierta casi 7.000 millones de euros. Además de Ouarzazate los lugares elegidos para poner las plantas son Ain Beni Mathar, Sabkha Tah, Foum el Oued y Bujador, estos dos últimos en el antiguo Sáhara español.
Este además de ser el mayor contrato firmado por una empresa española en Marruecos es uno de los más grandes contratos firmados por una empresa española en toda África, por lo que esta es una gran oportunidad que tiene España para afianzar las relaciones tanto con Marruecos como con el resto de los países Africanos.