Con las altas cifras de paro que experimentamos, no es de extrañar que mucha gente busque ya trabajo de debajo de las piedras. Sabemos que la mayoría de las empresas no están contratando nuevos empleados y que muchos de los contratos que se hacen actualmente tienen unas condiciones poco deseables.
Todo esto está impulsando a muchas personas a hacerse autónomas. Trabajar por cuenta propia siempre otorga mayor flexibilidad y cada uno se pone las condiciones que desea. Por supuesto, no está exento de riesgos, es más, es una de las maneras de trabajar en las que el salario mensual está menos fijado, por lo que es bueno tener una idea sensata y fuerte para comenzar a trabajar como autónomo.
La poca seguridad laboral no es el único inconveniente que tiene ser autónomo, también hay que tener en cuenta que los costes son bastante altos. Trabajar como autónomo tiene varios costes que muchos no tienen claro veamos en qué consisten:
Cotización a la seguridad social
Suele representar el gasto más alto, hay que diferenciar entre aquellos que no tienen una actividad asalariada y los que compaginan una actividad asalariada:
- Autónomo sin actividad asalariada
La cobertura más barata que un autónomo puede pagar a la Seguridad Social cubre tan solo salud y derecho a una pensión muy baja, que será calculada sobre una base mínimo. El precio de esta será de 255€ mensuales.
La cobertura que además cubre una mutua privada y un seguro de desempleo cuesta 283€ mensuales.
Estos son los regímenes generales, veamos los especiales:
Trabajadores agrarios y empleados del hogar. Solamente deben pagar 166€ al mes
Recientemente se ha implementado una medida:
Todos los nuevos autónomos independientemente de edad o género, cotizarán 50€ al mes durante los 6 primeros meses, lo que supondría aproximadamente el 20% de una cotización regular. ¿Y los siguientes meses?
- Primeros 6 meses: 50€ (20%)
- Entre los 6 y 12 primeros meses: 130€ (50%)
- Los 18 meses siguientes: 180€ (70%)
Se trata de una medida para favorecer a todos aquellos emprendedores que aun no reciben demasiados beneficios y las cuotas a la Seguridad Social les resultan demasiado altas.
- Autónomos que compaginan una actividad asalariada
Se trata de los autónomos que también trabajan por cuenta ajena. Hasta ahora, solo podían recuperar el 50% de la cotización a la Seguridad Social si en su actividad asalariada cotizaban con el máximo.
A partir de 2014, se ha dicho que solo pagarán la mitad de la cotización y a partir de 2015, solo el 25%.
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