Si usted encuentra que las personas no están respondiendo a sus palabras, de la forma en cómo usted lo desea, puede tener algo que ver con su forma de comunicarse. La comunicación eficaz es la piedra angular de cualquier relación profesional o interpersonal. Si lo piensa bien, el significado de su mensaje se reduce a la interpretación, no a su intención. Si usted quiere dominar el arte de la interacción exitosa, existen algunas estrategias que puede practicar y que le podrán ayudar a lo largo del camino.
Habilidades verbales
Para analizar su estilo comunicativo, empiece a observar sus habilidades verbales. Usted puede transmitir un mensaje a su audiencia, a través de una presentación, un discurso o simplemente una conversación. Su comunicación verbal puede tener un efecto significativo sobre la forma en como su público le entiende. También puede determinar si su público cree en lo que está diciendo.
La comunicación verbal consiste en el sonido de su voz, su acento, el tono y las palabras que utiliza. Para seleccionar el modo adecuado para transmitir su mensaje, primero debe entender a su audiencia. Por ejemplo, si usted está hablando en una conferencia hacia los mineros, usted no debe utilizar una voz con un lenguaje muy formal. Independientemente de su mensaje, sus oyentes lo despedirán antes de que sea escuchado.
Habilidades no verbales
Otro elemento de la comunicación efectiva es la habilidad no verbal. Estas señales silenciosas incluyen el contacto visual, lenguaje corporal, las expresiones faciales, y otros signos externos tales como la sudoración, los bostezos o la agitación. Para obtener el máximo provecho de su lenguaje no verbal, trate de sentarse de forma que se enfrente a su receptor y haga contacto visual directo. No se inquiete o haga movimientos que lo distraigan. Utilice un límite de proximidad en función del lugar de su audiencia. Por ejemplo, los estadounidenses se sienten más cómodos cuando existe por lo menos 5 pies de espacio entre ellos y una persona que no conocen, mientras que los europeos se sienten naturales a una distancia menor de 2 metros.
Siéntese con la espalda recta y trate de relajarse. Luego entregue el mensaje con sus habilidades comunicativas verbales e interactúe con las no verbales.
Retroalimentación
Finalmente, uno de los elementos más importantes de la comunicación eficaz es el que a menudo se descuida. Este elemento es la retroalimentación. La retroalimentación es esencial para componer un mensaje de éxito. Esta información puede ayudarle a modificar su mensaje para que pueda ser presentado con mayor eficacia. Esta retroalimentación proporcionada hace que después que se entrega el mensaje, la comunicación tenga un flujo interminable y circulen las ideas e informaciones necesarias.
