Existe la tendencia a pensar que las inversiones de seguridad en la empresa es cosa sólo de grandes compañías, empresas ubicadas en entornos desprotegidos, etc. Esta es una postura peligrosa, en primer lugar, porque nadie esta libre de sufrir un robo o un intento de fraude, y, en segundo lugar, porque el impacto que a una pyme le puede suponer un golpe de estas características, es generalmente muy superior a lo que le supondría a una gran compañía.
No se debe, pues, subestimar la importancia de la seguridad en la pequeña y mediana empresa. Sin embargo, si se debe racionalizar.
Claves para racionalizar la seguridad en la pyme
No todo el mundo va a tener los mismos niveles de exigencia de protección. Esto es realmente importante, y, hay que tener en cuenta, que una fase crítica a la hora de determinar la seguridad necesaria, es el estudio de los riesgos que realmente corre la empresa.
Podemos llevar a cabo esta investigación por nosotros mismos, sobre todo si tenemos un buen conocimiento tanto de nuestra empresa como de los peligros a los que puede estar sometida. Sin embargo, aquí viene una de las primeras recomendaciones, acudir a profesionales. Una auditoría de seguridad, que la puede realizar una empresa de seguridad privada profesional, es una inversión a futuro.
En la no solamente se va a detectar la necesidad real de seguridad de la pyme, sino que, probablemente, se nos planteen las conclusiones como un plan con diferentes grados y niveles de importancia en la protección de la empresa. Es un coste que merece la pena asumir ya que nos va a permitir, posteriormente, tener un escenario claro de donde debemos poner el esfuerzo en la seguridad, y donde, tal vez, podemos minimizar algo dicho esfuerzo.
¿Qué podemos hacer nosotros en nuestra pyme?
Obviamente, hay cosas que podemos hacer para aumentar la seguridad de nuestra empresa. Desde aspectos físicos, como la vigilancia de la ubicación de la empresa a través de dispositivos de seguridad y disuasión, hasta un buen control de puertas, llaves, etc. Pero hay dos cosas muy importantes que siempre deberíamos tener claras y, sobre todo, poner en marcha cuanto antes.
Un seguro adecuado: de acuerdo, no es una protección contra el robo, pero si es una herramienta de seguridad. Hoy en día los seguros son tremendamente flexibles, y las compañías aseguradoras nos permiten adecuar la póliza a nuestra necesidad. Un seguro adecuado, que contemple el robo, los desperfectos, etc. es muy importante en el conjunto de las herramientas de protección de la compañía.
La seguridad digital: tomarse en serio la seguridad digital es clave. Hoy en día una parte fundamental de los riesgos de las pymes vienen dados precisamente por los ataques a través de Internet. En este sentido, mantener políticas de prevención, controlar los riesgos a través de una buena elección de dispositivos y software de protección, es básico. La formación e incluso, acudir también a entornos profesionales es otra clave a valorar.
