La inflación ha impactado negativamente en millones de hogares, provocando que la tasa de ahorro en 2022 se sitúe en un 7,2% de la renta disponible. Esta cifra representa una disminución de 6,6 puntos en comparación con el año anterior y es la más baja registrada desde 2018, según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Es evidente que las familias españolas están enfrentando dificultades para ahorrar dinero y mantener una reserva económica en estos tiempos. Dadas las dificultades económicas actuales, se vislumbra un panorama complicado a la hora de planificar las ansiadas vacaciones de verano.
¿Es posible ahorrar con tan poco tiempo para el verano?
Este periodo de descanso es fundamental para desconectar de la rutina y recargar energías de cara al tramo final del año. Sin embargo, con las restricciones financieras vigentes, la organización de las vacaciones se convierte en un desafío adicional que requiere mayor atención y consideración. Será necesario encontrar alternativas creativas y económicas para disfrutar de un merecido descanso sin comprometer aún más la situación financiera personal.
Sin embargo, hay estrategias disponibles para poder ahorrar algún dinero y así construir un pequeño fondo antes de la llegada de los meses de julio y agosto. Aunque es importante destacar que lo ideal es planificar las vacaciones con antelación.
De esta manera, se pueden aprovechar mejores ofertas y tarifas más económicas, lo cual ayudará a reducir los gastos generales del viaje. Además, anticiparse permite tener más opciones disponibles y mayor flexibilidad a la hora de seleccionar destinos y actividades, lo que contribuirá a maximizar el presupuesto personal y obtener una experiencia vacacional satisfactoria sin poner en riesgo las finanzas.
Una opción que se presenta como viable a un mes de distancia es el desafío de los 30 días. Este método consiste en ahorrar progresivamente cada día hasta llegar al último día del mes. Los expertos en finanzas personales señalan que ahorrar una cantidad específica de forma aislada puede ser sencillo, pero se vuelve más complicado cuando se requiere este comportamiento a lo largo del tiempo.
Es precisamente por esta razón que se plantea como un desafío, ya que implica mantener una disciplina constante y superar la tentación de gastar el dinero ahorrado en otros aspectos.
Específicamente, en el desafío de los 30 días, se establece ahorrar un euro el primer día del mes, dos euros el segundo día, tres euros el tercero, y así sucesivamente, incrementando el ahorro en un euro cada día.
Esta estrategia sencilla nos permitirá acumular 465 euros en un mes de 30 días y casi 500 euros (496 euros) en el caso de que el mes tenga 31 días. Al seguir esta progresión, se logra un ahorro significativo al final del mes, lo cual puede ser una forma efectiva de construir un colchón financiero sin grandes esfuerzos.
Las cantidades pueden ajustarse según los objetivos que cada persona se haya propuesto. Para almacenar el dinero ahorrado, se pueden utilizar diferentes métodos como una hucha, una caja o un sobre, especialmente si se trata de dinero en efectivo.
Sin embargo, también es posible transferir el dinero a una cuenta de ahorro separada, lo que brinda una mayor seguridad y la posibilidad de obtener intereses sobre el saldo acumulado. La elección del método surgió de las preferencias individuales y de la conveniencia de cada opción para administrar y proteger los ahorros de manera efectiva.
