Se tenga la empresa que se tenga no cabe la menor duda de que uno de los factores fundamentales para que ésta funcione correctamente es el de fomentar la productividad de las personas que para ella trabajan. Aunque esto no siempre es fácil, sobre todo cuando lo que se quiere es mantener como una constante, hay una serie de consejos que se pueden seguir para que el objetivo sea más alcanzable.
- Equipamiento de oficina. En el sentido de que los trabajadores cuenten con todo lo que requieren para aprovechar al máximo su tiempo y también que se sientan cómodos con elementos tan básicos como las mesas o las sillas. Sin esto lo más probable es que se cuente con más bajas médicas de las que se deberían. En Kaiser + Kraft están especializados en este sector, por lo que es aquí donde se puede encontrar todo lo que se precise a este respecto.
- Transformación digital. Este paso para las empresas más veteranas puede suponer una inversión importante en tiempo y dinero, pero sin lugar a dudas se agradecerá en el medio y largo plazo.
- Motivación. De vez en cuando hay que estar atentos a aquellos empleados que tratan de hacer las cosas de la mejor manera posible. A todos, pero especialmente a ellos, hay que hacerles ver que sí que esto se tiene en cuenta y se valora. Un trabajador motivado vale por dos.
- Formación continua. El mundo cambia constantemente y más ahora que estamos conectados con Internet y las tecnologías se desarrollan de manera constante. Es importante apostar por la formación de los trabajadores como un garante de que éstos podrán ofrecer el mejor servicio posible y, por tanto, ser más eficientes.
- Planificación. Hay que saber qué objetivos se tienen y la ruta a seguir para conseguirlos porque esta es la única manera de poder lograrlos. El integrar al equipo como una parte fundamental de esto les hará ver que es algo suyo también y pondrán más empeño en conseguir esos logros. Una vez más, de alcanzarlos, no está de más la motivación e, incluso, alguna recompensa extra.
- Dar ejemplo. Si se quiere que los empleados apuesten por la empresa, que estén dispuestos a hacer horas extra (aunque recompensadas) y que el objetivo que se tenga sea algo común, sin lugar a duda, los dirigentes deberán ser los primeros en dar ejemplo. Sólo así el resto podrá seguirles.
- Administrar el tiempo. Se suele ver que los empleados, aunque estén contratados para una labor muy concreta, suelen sobresalir en determinados ámbitos. No hay que cerrarse a esto más bien al contrario hay que estar abiertos a explotar las capacidades de cada uno y a que el trabajo se ordene en cuanto a tiempos. Si se sabe manejar esto se podrá ver que, al final del día, se ha rendido mucho más de lo esperado.
- Encuentros sociales. Porque la plantilla puede ser pequeña o de lo más amplia. El que los trabajadores se conozcan entre sí y no sean meros nombres o números los unos para con los otros suele dar una mayor conciencia de dónde se está, para qué y con quién se está trabajando. Así se genera el concepto de familia laboral y la productividad mejora.