Recientemente se publicó un interesante artículo del autor Carlos Barranco en la página web»contunegocio», una página iniciativa de movistar y orientada al mundo de la pyme. En este artículo el autor mostraba su inquietud ante la necesidad de un gran número de pequeñas y medianas empresas de mejorar su rendimiento, y siempre independientemente de la tecnología adaptada y utilizada o de las últimas tendencias en torno al «management » estratégico.
El autor emitía un grupo de diez consejos o recomendaciones realmente interesantes que voy a intentar resumir a continuación, intentando ser fiel a lo que el autor intenta transmitir.
La importancia del proceso de la toma de decisiones
Considerada como la parte más complicada en las actuaciones de los directivos, en las pymes resulta todavía algo más dificil dado el entorno tan cambiante en el que se deben de tomar las decisiones y a la escasa información de la que a veces se dispone. A pesar de estas dificultades, las decisiones deben ser tomadas con ilusión, confianza y entusiasmo, no olvidando jamás que los errores siempre nos aportan una gran lección.
Pensar siempre de modo estratégico
La actividad diaria y los problemas cotidianos que surgen con nuestra actividad cotidiana a veces nos impiden ver la estrategia de nuestra empresa más allá del día a día. Es un grave error. Jamás debemos perder la perspectiva ni dejar de pensar en nuestros objetivos a medio y a largo plazo.
Mimar a nuestros clientes y a nuestros empleados
Ellos, tanto unos como otros, representan los activos más importantes de nuestra empresa.
Concentrarse en las operaciones
Es muy importante concentrarse en las actividades que tienen como resultado nuestros productos y servicios, ya que son el único modo real de mejorar el rendimiento de una empresa.
Centrarse en nuestros productos y servicios
En difinitiva, vigilar constantemente que es lo que demandan y necesitan los clientes para, de ese modo, poder satisfacer sus necesidades y gustos.
Máxima calidad de nuestra empresa
Para ello debemos considerar siempre la calidad como un conjunto de factores que muestran en qué medida nuestros productos satisfacen la demanda de los consumidores. Nuestra visión de la calidad no la deben dar las certificaciones, sino nuestros clientes, y debemos responderles superando sus expectativas.
Diseño propio de los procesos de la empresa
Para ello basta con partir del concepto de proceso, que se puede definir como un conjunto de tareas que unidas dan como resultado la generación de valor para el cliente. Si no tenemos control sobre algo tan vital como nuestra capacidad a la hora de generar valor para el cliente, los problemas estarán a la vuelta de la esquina.
La importancia de la planificación y de la anticipación
Se trata principalmente de que a través de una buena planificación consigamos anticiparnos a las propias necesidades de los clientes.
Vigilancia de la cadena de suministro
Para muchas empresas la cadena de suministro es una de las grandes olvidadas y ese descuido suele costar clientes y, por lo tanto, mucho dinero.
La importancia de la medición de los resultados
Los resultados debes ser medibles y verificables, y la importancia de medirlos radica en la cantidad de detalles y de lecciones que nos aportarán; especialmente de cara al futuro y a la estrategia a implantar.
Perfecto para los emprendedores, muy buen articulo!