¿Puedes franquiciar tu negocio?

Para que tu negocio llegue a ser franquiciable necesitas que encaje en ciertos requisitos de partida, que cumpla varias condiciones y dar una serie de pasos.

Existen diversas maneras de poner en marcha un negocio. Puedes optar por un modelo tradicional, una startup o una franquicia, entre otras posibilidades. Si te decides por esta última fórmula, hay dos posibles roles: o eres franquiciado o actúas como franquiciador. Sin embargo, no todos los planteamientos comerciales encajan en esta segunda opción. Descubre aquí si puedes franquiciar tu negocio.

Franquiciar

Antes de entrar en materia conviene saber ciertas cuestiones relacionadas con las franquicias, una forma de negocio que mueve en España unos 27.000 millones de euros anuales.

Qué es una franquicia

El sistema comercial de la franquicia se basa en la relación entre dos partes. Básicamente, una abona un montante de dinero previamente pactado -el canon de entrada y el royalty- por recibir de la otra la licencia para explotar su marca de una forma determinada y por un tiempo limitado. El primero es el franquiciado y el otro, el franquiciador (dueño de la enseña y, generalmente, el que tuvo la idea, el creador del negocio).

Qué necesitas para franquiciar tu negocio

El franquiciado trata de aprovechar un negocio probado, ya asentado en el mercado. Por su parte, el franquiciador busca ampliarlo, explotarlo de manera indirecta mediante la cesión de determinadas cuestionadas relacionadas con el mismo a un segundo. No obstante, como ya se ha indicado, no todos los negocios están preparados para ser franquiciados, sólo algunos pueden ser replicados. Aquí te contamos las características mínimas que debe cumplir un negocio para poder ser franquiciado y las preguntas que debes hacerte a ti mismo.

  • A pesar de que resulte obvio, la primera cuestión necesaria para que un negocio sea franquiciable es que lo sea. Es decir, ha de ser duplicable. Para ello, tiene que ser un modelo sencillo, que no sea excesivamente sofisticado. Además, el negocio debe disponer de ciertas facilidades para fidelizar al franquiciado.
  • ¿Está probado el producto que quieres comercializar resulta competitivo tanto en calidad como en precio? ¿Se trata de un artículo estacional o que sólo está de moda?
  • ¿Cuenta ya tu marca con un éxito comercial reconocido?
  • Analiza el sector. No sólo importa el modelo de negocio sino que también hay que realizar un diagnóstico del ámbito en el que opera. ¿Cuánto recorrido tiene el sector, se encuentra en un momento al alza? ¿En qué estado se encuentra la competencia y tú mismo respecto a ellos?
  • ¿Necesitas algún añadido tecnológico para ceder la licencia a los franquiciados?
  • Capacidad financiera. Para actuar como franquiciador necesitas recursos económicos, ya que te enfrentarás a determinadas inversiones: encontrar y seleccionar a los franquiciados, darles formación y asistencia, etc.

Pasos para franquiciar tu negocio

Hecha la evaluación del negocio, así como las comprobaciones necesarias, habrás de dar los siguientes pasos si quieres ser franquiciado:

  • Diseñar el funcionamiento de la estructura de la franquicia.
  • Diseñar la estructura financiera de la franquicia: canon inicial, royalties de explotación y de publicidad, margen que ofrece el producto, etc.
  • Realizar un estudio económico. Como al empezar cualquier aventura empresarial, esta herramienta es fundamental.
  • Estudio relacional, estructural y jurídico.
  • Legalizar la franquicia.
  • Fijar la estrategia de comercialización de la franquicia.
  • Documentación que debes preparar. Como franquiciador debes facilitar el contrato de franquicia, el dossier comercial y el manual de identidad visual corporativa y de adecuación de locales.
  • Contactar y captar a los franquiciados en ferias, en apariciones en medios de comunicación, usando redes y circuitos especializados, etc.
  • Proceso de selección de candidatos a franquiciados. Cuenta el perfil personal, pero sobre todo la solvencia económica y la ubicación del local (ciudad, zona de la misma, particularidades del área, etc.).

Franquicia

Cuánto cuesta franquiciar un negocio

El coste de franquiciar un negocio es todo un mundo. Dependerá del éxito que ya tenga, del número de locales ya abiertos o de las características de éstos, entre otros factores. Sin embargo, como norma general, según los expertos, poner en marcha un canal de franquicias suele costar un importe similar al de abrir un segundo local. Lo habitual es que la primera o las primeras franquicias puedan no ser rentables, sobre todo, al principio. A medida que vayas extendiendo tu red de franquicias, si es posible, lo normal es que ésta sea más rentable.

Ventajas de franquiciar tu negocio

Si tu negocio cumple las condiciones anteriores, y es efectivamente franquiciable, este modelo puede proporcionarte los siguientes beneficios:

  • Ingresos fijos que no dependan tanto de las oscilaciones del mercado: el pago del franquiciado, el royalty.
  • Expansión del negocio a menor coste del habitual y más rápido. Aunque franquiciar no sale barato, la inversión es menor que si abres locales directamente, ocupándote de todos los gastos.
  • Potenciación de la marca, que cubrirá más mercados que si actúas por tu cuenta.
  • Estandarización de procesos. Al tener que colaborar con los franquiciados, tendrás que estructurar el negocio de forma muy clara.
  • Menores gastos en Recursos Humanos.
  • Reduces riesgos financieros y comerciales.
  • No necesitas controlar tanto a los mandos intermedios, ya que el propio franquiciado es el primer interesado en que el negocio funcione.
  • Como franquiciador aumentarás el control de la producción, el suministro y la distribución del producto.

Desventajas de franquiciar tu negocio

Sin embargo, ‘no es oro todo lo que reluce’ al franquiciar. También hay inconvenientes:

  • El desembolso inicial para moldear y lanzar la franquicia no es poca cosa.
  • Cada unidad de negocio dará menos dinero en el sistema de franquicia.
  • Los errores del franquiciado pueden perjudicarte, sobre todo, a tu marca.
  • La relación con el franquiciado no es siempre fácil, ya que no es tu subordinado y tiene una cierta capacidad de maniobra sin tener que darte explicaciones.
  • Cuidado al transmitir o ceder tus conocimientos a los franquiciados: una cláusula de confidencialidad puede ser muy útil.
  • Te expones a competencia desleal, tanto de antiguos o actuales franquiciados como de personas que, simplemente, se interesaron en algún momento por tu negocio.
  • Reticencias del franquiciado a introducir cambios.

¿Puede un autónomo franquiciar su negocio?

Por supuesto que sí: un trabajador por cuenta propia puede franquiciar su negocio si cumple las condiciones expuestas. En ese sentido, no hay diferencia respecto a una sociedad, una pyme o cualquier empresa.

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